El Observatorio presente en el Congreso Internacional “Diálogos de Esperanza”

Los días 2 y 3 de diciembre de 2025, el Observatorio Mundial de las Mujeres de la UMOFC participó en el Congreso Internacional “Diálogos de Esperanza: Reconciliación y Cuidado para una Vida Libre de Violencias”, realizado en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE) en Quito. El evento, organizado por el Servicio Jesuita a Refugiados Ecuador (JRS), la PUCE y la Red Jesuita a Migrantes, se llevó a cabo en el marco del 25N y de los 15 días de activismo por la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, reuniendo a académicos, líderes comunitarios, organizaciones sociales y mujeres sobrevivientes de violencia y movilidad humana de toda la región.

El Observatorio Mundial de las Mujeres (WWO) tuvo una participación destacada a través de Ma. de Lourdes Espinoza, vicepresidenta para América Latina y El Caribe de la UMOFC, quien fue invitada por Belén Carrillo, directora del JRS Ecuador, para intervenir en el panel regional dedicado a la situación de las mujeres migrantes y refugiadas en América Latina y el Caribe. Su presencia permitió visibilizar el compromiso del WWO con las mujeres en contextos de movilidad, así como los hallazgos, aprendizajes e impactos de los proyectos que se desarrollan actualmente en la región.

Voz del WWO en el panel regional

Durante su ponencia, Ma. de Lourdes Espinoza presentó los avances del WWO en el estudio y acompañamiento a mujeres migrantes, en especial aquellas que enfrentan violencia basada en género, discriminación y situaciones de vulnerabilidad jurídica a lo largo de sus rutas. A través de la exposición “Socialización de los Resultados del Observatorio: Situación de las mujeres migrantes y refugiadas en Latinoamérica y el Caribe (LAC)”, destacó la importancia de escuchar y documentar sus testimonios, comprender sus experiencias y fortalecer los mecanismos de acceso a la justicia, el apoyo psicosocial y la construcción de proyectos de vida dignos y seguros. Señaló además el valor de los relatos recopilados en México y otros países de la región, así como las acciones formativas y de sensibilización impulsadas por la UMOFC para promover comunidades más solidarias y protectoras con las mujeres en movilidad.

El primer día del congreso incluyó espacios académicos y testimoniales de gran profundidad, entre ellos la conferencia magistral sobre el ius puniendi estatal en los delitos de femicidio, paneles sobre feminicidios y violencia en la región, y el análisis del contexto que enfrentan mujeres migrantes en Ecuador, Perú y otros países. Uno de los momentos más significativos fue la participación de Anamari Mazorra, de la Facultad de Ciencias Filosóficas y Teológicas de la PUCE, con su conferencia “La ética del cuidado”, que invitó a reflexionar sobre la responsabilidad ética de acompañar la fragilidad humana desde la empatía, la presencia y la dignidad.

El congreso también integró espacios comunitarios de gran simbolismo, como el ritual de homenaje a mujeres sobrevivientes, la presentación de la obra teatral El Diario de Gianella, y círculos de mujeres que permitieron reconocer la fuerza de la sororidad como camino de sanación. El segundo día estuvo dedicado a experiencias de acompañamiento y prevención de la violencia, incluyendo la socialización de los Grupos de Sororidad de El Oro y Guayas, las experiencias de casas de acogida y redes comunitarias, así como el fortalecimiento del acompañamiento espiritual en clave de hospitalidad.

Fortalecimiento de alianzas

La participación del WWO reafirma su misión de escuchar, comprender y visibilizar la realidad de las mujeres en movilidad humana, promoviendo acciones concretas que favorezcan la justicia, la paz y la dignidad. La presencia de Ma. de Lourdes Espinoza en este espacio no solo enriqueció el diálogo regional, sino que también fortaleció las alianzas con instituciones comprometidas con la protección y el acompañamiento integral de las mujeres.

Este encuentro en la PUCE se consolida así como un espacio de reflexión, denuncia y esperanza, donde la academia, la sociedad civil, las organizaciones de fe y las comunidades se unen para construir caminos seguros y libres de violencia para todas las mujeres, especialmente las que se encuentran en tránsito, desplazamiento o situaciones de vulnerabilidad. El WWO renueva su compromiso de seguir generando conocimiento, incidencia y articulación para contribuir a una región más humana, justa y solidaria con las mujeres migrantes y refugiadas.